Dulcenombre Revuelto

La primera noticia de que existía una Fundación para huérfanos y viudas de periodistas en Madrid, la tuve a través de una vecina mía, Charo. Cuando me quedé viuda me habló de ella.
Nunca me gustó inspirar pena o algo parecido y desestimé la idea de pasarme por la Fundación de la que me habían hablado. Pensé que era lo suficientemente autosuficiente como para poder salir sola de tal trance, dedicándome a mis hijos, claro.
Al cabo del año, ya más repuesta del “palo”, pensé que quizá no fuera tan mala idea enterarme al menos de lo que era esta institución. Y me pasé por allí. Y, sin darme casi ni cuenta, me encontré inmersa (nos encontramos, mis hijos y yo) en una segunda familia, acogedora, cariñosa, atenta a cualquier problema o necesidad que tuviéramos.
Nos ayudaron moral y económicamente (con becas para los chavales, en cuanto a lo económico) y con cariño, actividades, excursiones, diversas reuniones que me/nos permitieron frecuentar a otras personas con nuestras mismas problemáticas.
Les estamos muy agradecidos y saben que cuentan con todo nuestro cariño, respeto y colaboración.
Fdo. Dulcenombre Revuelto Bárcena (viuda de Félix Angel Ortega Muñoz), periodista.

La primera noticia de que existía una Fundación para huérfanos y viudas de periodistas en Madrid, la tuve a través de una vecina mía, Charo. Cuando me quedé viuda me habló de ella.

Nunca me gustó inspirar pena o algo parecido y desestimé la idea de pasarme por la Fundación de la que me habían hablado. Pensé que era lo suficientemente autosuficiente como para poder salir sola de tal trance, dedicándome a mis hijos, claro.

Al cabo del año, ya más repuesta del “palo”, pensé que quizá no fuera tan mala idea enterarme al menos de lo que era esta institución. Y me pasé por allí. Y, sin darme casi ni cuenta, me encontré inmersa (nos encontramos, mis hijos y yo) en una segunda familia, acogedora, cariñosa, atenta a cualquier problema o necesidad que tuviéramos.

Nos ayudaron moral y económicamente (con becas para los chavales, en cuanto a lo económico) y con cariño, actividades, excursiones, diversas reuniones que me/nos permitieron frecuentar a otras personas con nuestras mismas problemáticas.

Les estamos muy agradecidos y saben que cuentan con todo nuestro cariño, respeto y colaboración.

Artículo anteriorRosa Vázquez
Artículo siguienteInés Fernández